miércoles, 27 de octubre de 2010

Antología de poesía perfecta

Aunque Cocteau salvaría el fuego de un incendio que quisiera acabar con obras de arte, yo salvaría los siguientes poemas, aunque ya son eternos:

Tabaquería de Fernando Pessoa

Canción de una dama en la sombra, Corona de Paul Celan

Robaiyat de Omar Khayam (todos)

El Golem, El Poema de los dones de Jorge Luis Borges

El poemario Guarida de un animal que no existe de Leopoldo María Panero, ver Audere, A Cavalcanti, Pata de mono, Me celebro y me odio y este:

Nomme du Dieu

Ah, el fruto sin ojos en donde el alma no sueña
en donde los ángeles cabalgan a lomos de tortugas
y el animal más valiente es la rosa
en el límite atroz en donde muere el hombre
caído
a los pies del poema.

Alquimia vital de Jorge Carrera Andrade

Marina de Humberto Fierro


martes, 5 de octubre de 2010

Lolita


Locamente mía

entre los árboles la ninfa


Soy el hacedor desde la niña

El viejo soplador de vidrio


Paisajes símiles del tiempo

compartido entre luchas y estadías.

Tu vejez se aproxima

y la mía se evapora.


La muerte no te toca

entre las letras.

Tu nombre, entre fonemas, en los labios

me recuerda que

ya estoy muerto.